Llamados a Crecer
1 Corintios 3:1-10 RVR95
1 De manera que yo, hermanos, no pude hablaros como a espirituales, sino como a carnales, como a niños en Cristo. 2 Os di a beber leche, no alimento sólido, porque aún no erais capaces; ni sois capaces todavía, 3 porque aún sois carnales. En efecto, habiendo entre vosotros celos, contiendas y disensiones, ¿no sois carnales y andáis como hombres? 4 Pues cuando uno dice: «Yo ciertamente soy de Pablo», y el otro: «Yo soy de Apolos», ¿no sois carnales? 5 ¿Qué, pues, es Pablo, y qué es Apolos? Servidores por medio de los cuales habéis creído; y eso según lo que a cada uno concedió el Señor. 6 Yo planté, Apolos regó; pero el crecimiento lo ha dado Dios. 7 Así que ni el que planta es algo ni el que riega, sino Dios que da el crecimiento. 8 Y el que planta y el que riega son una misma cosa, aunque cada uno recibirá su recompensa conforme a su labor, 9 porque nosotros somos colaboradores de Dios, y vosotros sois labranza de Dios, edificio de Dios. 10 Conforme a la gracia de Dios que me ha sido dada, yo, como perito arquitecto, puse el fundamento, y otro edifica encima; pero cada uno mire cómo sobreedifica
Idea Central: A través de la Palabra de Dios debemos evaluar nuestra vida espiritual
Introducción:
El Apóstol Pablo hace una evaluación de la vida espiritual de la iglesia de los Corintios. Ellos necesitaban ser amonestados acerca de su condición espiritual y buscar el cambio que viene de Dios. Esta evaluación nos sirve de referente a nosotros también.
I. Nosotros debemos evaluar qué tipo de creyentes somos. 1 Cort. 3:1
De manera que yo, hermanos, no pude hablaros como a espirituales, sino como a carnales, como a niños en Cristo.
1 Corintios 3:1 RVR95
1 De manera que yo, hermanos, no pude hablaros como a espirituales, sino como a carnales, como a niños en Cristo
- Los creyentes espirituales son los que dejan que Cristo controle sus vidas (1 Cort. 2:14-16; Gál. 5:22-23).
1 Corintios 2:14-16 RVR95
14 Pero el hombre natural no percibe las cosas que son del Espíritu de Dios, porque para él son locura; y no las puede entender, porque se han de discernir espiritualmente. 15 En cambio, el espiritual juzga todas las cosas, sin que él sea juzgado por nadie. 16 ¿Quién conoció la mente del Señor? ¿Quién lo instruirá? Pues bien, nosotros tenemos la mente de Cristo.
Gálatas 5:22-23 RVR95
22 Pero el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe, 23 mansedumbre, templanza; contra tales cosas no hay ley.
- Los creyentes carnales son aquellos que no tienen su vida sometida por completo a Cristo (1 Cort. 3:3, Gál. 5:19-21).
1 Corintios 3:3 RVR95
3 porque aún sois carnales. En efecto, habiendo entre vosotros celos, contiendas y disensiones, ¿no sois carnales y andáis como hombres?
Gálatas 5:19-21 RVR95
19 Manifiestas son las obras de la carne, que son: adulterio, fornicación, inmundicia, lujuria, 20 idolatría, hechicerías, enemistades, pleitos, celos, iras, contiendas, divisiones, herejías, 21 envidias, homicidios, borracheras, orgías, y cosas semejantes a estas. En cuanto a esto, os advierto, como ya os he dicho antes, que los que practican tales cosas no heredarán el reino de Dios.
¿Qué tipo de creyentes nos consideramos?
II. Nosotros debemos evaluar la manera de alimentarnos espiritualmente. 1 Cort. 3:2Os di a beber leche, y no vianda; porque aún no erais capaces, ni sois capaces todavía…
1 Corintios 3:2 RVR95
2 Os di a beber leche, no alimento sólido, porque aún no erais capaces; ni sois capaces todavía,
- La alimentación espiritual básica distingue a un creyente inmaduro (Heb. 5:11-13).
Hebreos 5:11-13 RVR95
11 Acerca de esto tenemos mucho que decir, pero es difícil de explicar, por cuanto os habéis hecho tardos para oír. 12 Debiendo ser ya maestros después de tanto tiempo, tenéis necesidad de que se os vuelva a enseñar cuáles son los primeros rudimentos de las palabras de Dios; y habéis llegado a ser tales, que tenéis necesidad de leche y no de alimento sólido. 13 Y todo aquel que participa de la leche es inexperto en la palabra de justicia, porque es niño.
- La alimentación espiritual sólida distingue a los creyentes con madurez (Heb. 5:14).
Hebreos 5:14 RVR95
14 El alimento sólido es para los que han alcanzado madurez, para los que por el uso tienen los sentidos ejercitados en el discernimiento del bien y del mal.
¿Con qué tipo de alimento espiritual te estás alimentando?
III. Nosotros debemos evaluar nuestras actitudes. 1 Cort. 3:3…porque aún sois carnales; pues habiendo entre vosotros celos, contiendas y disensiones, ¿no sois carnales, y andáis como hombres?
1 Corintios 3:3 RVR95
3 porque aún sois carnales. En efecto, habiendo entre vosotros celos, contiendas y disensiones, ¿no sois carnales y andáis como hombres?
- Las erradas actitudes espirituales distinguen la inmadurez espiritual (habiendo entre vosotros celos, contiendas y disensiones).
- Las erradas actitudes espirituales nos hacen actuar como no creyentes (¿no sois carnales, y andáis como hombres?)
¿Cuáles son las actitudes que distinguen nuestra vida espiritual?
IV. Nosotros debemos evaluar a quién pertenecemos. 1 Cort. 3:4 Porque diciendo el uno: Yo ciertamente soy de Pablo; y el otro: Yo soy de Apolos, ¿no sois carnales?
- Nosotros no pertenecemos a ningún líder espiritual (1. Cort. 3:4)
1 Corintios 3:4 RVR95
4 Pues cuando uno dice: «Yo ciertamente soy de Pablo», y el otro: «Yo soy de Apolos», ¿no sois carnales?
1 Corintios 3:4 RVR95
4 Pues cuando uno dice: «Yo ciertamente soy de Pablo», y el otro: «Yo soy de Apolos», ¿no sois carnales?
- Nosotros pertenecemos a Cristo (1 Cort. 3:5-9, Heb. 12:1-3).
1 Corintios 3:5-9 RVR95
5 ¿Qué, pues, es Pablo, y qué es Apolos? Servidores por medio de los cuales habéis creído; y eso según lo que a cada uno concedió el Señor. 6 Yo planté, Apolos regó; pero el crecimiento lo ha dado Dios. 7 Así que ni el que planta es algo ni el que riega, sino Dios que da el crecimiento. 8 Y el que planta y el que riega son una misma cosa, aunque cada uno recibirá su recompensa conforme a su labor, 9 porque nosotros somos colaboradores de Dios, y vosotros sois labranza de Dios, edificio de Dios.
Hebreos 12:1-3 RVR95
1 Por tanto, nosotros también, teniendo en derredor nuestro tan grande nube de testigos, despojémonos de todo peso y del pecado que nos asedia, y corramos con paciencia la carrera que tenemos por delante, 2 puestos los ojos en Jesús, el autor y consumador de la fe, el cual por el gozo puesto delante de él sufrió la cruz, menospreciando el oprobio, y se sentó a la diestra del trono de Dios. 3 Considerad a aquel que sufrió tal contradicción de pecadores contra sí mismo, para que vuestro ánimo no se canse hasta desmayar,
¿A quién perteneces como creyente?
Conclusión:
Sea cuál sea la evaluación de tu vida espiritual debes seguir buscando a Jesucristo.
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